El pasado 14 de enero el presidente estadounidense Joe Biden anunciaba que su gobierno retiraba a Cuba de la lista de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo. Al mismo tiempo, la cancillería cubana anunciaba que como parte “del espíritu del Jubileo ordinario 2025” -festividad católica- el gobierno de Díaz-Canel liberaría a 553 presos. Si bien en ningún momento el gobierno cubano ha anunciado que la liberación de los presos es producto de negociaciones con Estados Unidos donde -como ya ha sucedido- el Vaticano sirve como mediador, los hechos demuestran que las excarcelaciones son consecuencia del gesto del presidente Biden. Incluso, tanto la prensa del PCC, como las organizaciones extranjeras aliadas de la burocracia dirigente cubana, han insistido en celebrar la exclusión de la lista y silenciar la excarcelación de los presos. Por el contrario, la amplia oposición cubana se ha centrado más en celebrar la liberación de los presos que la medida de Biden. Si b...
Contra la restauración capitalista en Cuba y por la Revolución Mundial